El mundo marino es un gran maestro a la hora de establecer sinergias.

Estando en casa de mi amigo Ramiro Villanueva en la ciudad de Reading, Inglaterra, pude comprender de su relato como en el mundo marino, como en tantos otros, se desarrollan modelos win-win.

Mi amigo posee una gran pecera con varios peces Payaso (Amphitrion Pécula) por su traducción del latín que significa anfitrión. El caso es que este pez vive protegido dentro de una anémona, que es un animal césil (invertebrado) que posee tentáculos venenosos.

La simbiosis que se da entre el pez payaso y la anémona se manifiesta en el interesante equilibrio que alcanzan, ya que el pez payaso se refugia de sus perseguidores entre los tentáculos de la anémona, que en su caso evita picar a su anfitrión, y solo a él.

Seguro que en este momento estarás pensando: “de acuerdo, entiendo lo que gana el pez payaso en esta relación: seguridad, evitar convertirse en el plato principal de otro pez, pero y la anémona?  donde está el Ganar de la anémona?”.

Pues bien, la razón por la cual la anémona brinda protección al pez payaso y no se lo come es que el pez payaso con sus vistosos colores, atrae  a sus perseguidores hacia ella y permite que se beneficie de una fuente de alimentos más constante en el tiempo. Ahí está el Ganar de la anémona!!!

Así entonces, ambos conforman un dúo de supervivencia perfecto: el pez atrae comida a la anémona y esta a su vez le da refugio de los depredadores que le persiguen.

Ahora te invito a pensar:

¿Qué otro ejemplo de sinergia y ganar-ganar puedes ver en la naturaleza?, ¿Y en las empresas?